viernes, 31 de agosto de 2007

Lucy in the Sky with Diamond


En la corta existencia de las Bandas de Rock, los excesos son permitidos una y otra vez, RockStar Style, dirán muchos. La verdad es que acrósticos tampoco escapa a esta fundamental regla de la buena música, si bien el consumo de alucinógenos esta ajeno a nuestra imagen de Banda (tu joven lector Di No a las Drogas), el alcohol como estimulante social si es mas aceptado. Concientes de las bondades que produce el suave elixir en la irritada garganta de quienes osan cantar de vez en cuando, el exceso y abuso del mismo son un aliciente a explorar nuevos rincones de nuestra mente, decir y hacer cuanto se nos venga en gana; cantar y balbucear cuantos idiomas existan. Recordar letras ajenas al repertorio tradicional de la banda es una de las facultades que claramente no se condicen con el estado de intemperancia al que cierto sector de la Banda es mas Afín (eso va para voz crónica!!!). En conjunto los efectos de embriagadoras sustancias han producido destrozos tanto en escenarios diversos como en “camarines”, y planteado de esa forma, no nos podíamos mantener al margen. Si bien nadie ha incendiado guitarras, ni ha roto parlantes, sucesos particulares han sucedido a la banda. Finalmente, al alcanzar la gloria de la inconciencia los rockstars, exigen al límite de sus extenuados cuerpos, mostrando una vez más que solo son Dioses terrenales que necesitan descansar, aun cuando no se disponga de aposentos apropiados, siempre un buen diván hará olvidar la Noche anterior.

Para los Fans…

Texto by “La Mota Batera”

1 comentario:

Tenebras_ dijo...

espero que esto no sea una apología al abuso con uno mismo.........