En la corta existencia de las Bandas de Rock, los excesos son permitidos una y otra vez, RockStar Style, dirán muchos. La verdad es que acrósticos tampoco escapa a esta fundamental regla de la buena música, si bien el consumo de alucinógenos esta ajeno a nuestra imagen de Banda (tu joven lector Di No a las Drogas), el alcohol como estimulante social si es mas aceptado. Concientes de las bondades que produce el suave elixir en la irritada garganta de quienes osan cantar de vez en cuando, el exceso y abuso del mismo son un aliciente a explorar nuevos rincones de nuestra mente, decir y hacer cuanto se nos venga en gana; cantar y balbucear cuantos idiomas existan. Recordar letras ajenas al repertorio tradicional de la banda es una de las facultades que claramente no se condicen con el estado de intemperancia al que cierto sector de
Para los Fans…
Texto by “La Mota Batera”